Entrevistamos a Silvia Ayerra, ganadora del BasqueDok 2022

Entrevistamos a Silvia Ayerra (@sil_ayerra_) ganadora de la revisión de porfolios de la III Edición del BasqueDok Festival (@basquedokfestival). El premio que recibió Silvia le permitirá mostrar su trabajo próximamente en el BasqueDok Festival, además de exponerlo también en Barcelona.

Ayer se inició la nueva edición del festival, que viene de nuevo cargado de muchas actividades, os dejamos su página web para que no os las perdáis y a los que estáis cerca, ¡no dejéis de ir!

Háblanos un poco de ti ¿Quién eres? ¿Qué relación tienes con la fotografía?

Soy Silvia Ayerra, fotógrafa y artista plástica. Estoy especializada en Pedagogía Visual e Imagen Terapéutica. Me seduce lo cotidiano, las historias que podrían habitar en la cocina de cualquier hogar. Utilizo la imagen para mediar en procesos participativos con diferentes grupos sociales.

¿Qué tipo de fotografía te interesa más?

Me interesan las historias de las personas, los relatos que han quedado en un segundo plano, las fugas de la historia oficial. La verdadera importancia que encuentro en la fotografía es la forma en la que cada persona tiene de mirar el mundo.

¿Profesionalmente a qué tipo de fotografía te dedicas?

Me dedico a la intervención social con imagen. Ahora mismo estoy centrada en proyectos participativos con diferentes grupos sensibles. Utiliza la imagen como una
vía de comunicación para llegar donde muchas veces las palabras por sí solas no llegan. Trabajo sobre la recuperación de la memoria histórica de las mujeres de diferentes localidades, con personas en situación de acogida, con jóvenes migrantes o personas con diversidad funcional.

¿Qué quieres trasmitir con tus imágenes?

Me gustaría conectar con el mundo sensible de las personas, lograr un acercamiento al mundo interior de cada espectador.

Háblanos de “Dientes de leche”

Es un proyecto personal en el que a través del vínculo con mi tío José Antonio hago una reflexión sobre el paso del tiempo, la condición humana, la inocencia y la pérdida de bondades en la edad adulta. Un paseo por la memoria desde los márgenes. José Antonio tiene 76 años y una diversidad funcional no catalogada. Busco dar una visión más certera de la condición de dependencia, evidenciando que lo más importante que necesitamos todas las personas es el acompañamiento y las alianzas. Escuchando nuestras conversaciones, exploro los límites entre lo real y lo ficticio creando un imaginario visual fantástico.

¿Por qué decidiste presentarte al visionado de Porfolios del Basquedok?

En septiembre de 2022 terminé de darle forma al marco terapéutico y emocional del proyecto, sin el cual hubiera sido imposible crear la narrativa que hoy en día tiene. Pensé en probar a verme en contexto de festivales, y el Basquedok fue el primer visionado al que me presenté.

¿Cómo fue la experiencia?

Fue muy bien. Mi visionado fue con Richard Kalvar, todo un lujo que uno de los grandes nombres de la historia de la fotografía revise tu trabajo. Fue muy observador y cuidadoso con sus palabras. Me dijo que le parecía muy valiente por mi parte mostrar este proyecto, que sentía el respeto y el cariño con el que lo estaba haciendo, y que no dudaba que seguiría trabajando así.

¿Cuándo va a ser la exposición?

Será en el próximo año.

¿En qué proyectos estás trabajando?

Estoy inmersa en la primera fase del proyecto Laboratorio de Imagen y Memoria Viva. Estamos trabajando sobre la memoria y la vida de las mujeres de tres pueblos de Navarra a través de sus álbumes familiares y de la memoria oral. El resultado será una instalación audiovisual en las calles de cada pueblo que combine imágenes de archivo, retratos actuales de las generaciones más mayores y sus relatos en primera persona que irán vinculados a través de códigos QR.

También sigo trabajando en el proyecto de Diente de leche. No es un trabajo cerrado, y me gustaría completar el cuerpo fotográfico. Se pueden diferenciar tres estados fotográficos diferentes: lo puramente documental, las imágenes recreadas o escenificadas, y las imágenes intervenidas o collages. Quiero equilibrar estas partes, creando más escenarios ficticios y utilizando el archivo familiar.