Entrevistamos a Pepe Encinas, autor de ‘Congelando el tiempo. El alma detrás de la lente’

Hemos tenido el placer de entrevistar a Pepe Encinas, autor de la exposición ‘Congelando el tiempo. El alma detrás de la lente’, muestra que se encuentra en nuestro espacio expositivo y que podéis ver hasta el próximo 15 de enero.  No perdáis la oportunidad de conocer un poco mejor a este gran fotógrafo y todo su trabajo.

Háblanos un poco de ti ¿Quién eres? ¿Qué relación tienes con la fotografía?

Nací en Barcelona un 15 de noviembre de 1954 y ya desde muy joven empecé a sentir curiosidad por la realidad que me rodeaba. Empecé a publicar mis fotografías en revistas de barrio como 4 Cantons, en la revista de Santa Coloma de Gramenet, Grama y en el semanario gironí, Presència. Años de luchas y reivindicaciones vecinales. He sido testigo directo de los años de la Transición.

Mi carrera profesional está estrechamente ligada a dos periódicos de Barcelona: el desaparecido Tele/eXpress (1974-1978) y El Periódico de Catalunya, dónde formé parte del equipo de reporteros gráficos desde su fundación y más tarde como editor gráfico hasta el 2009. Trabajar en dos periódicos de Barcelona me ha dado la posibilidad de vivir momentos inolvidables y tener un gran conocimiento de la ciudad. Barcelona es mi gran pasión y sigo trabajando para intentar captar la esencia de mi ciudad, que va cambiando cada día y cada vez más rápido.

 

¿Cuál es tu equipo de trabajo?

Soy de la generación de las réflex y como fotógrafo de los años setenta echaba de menos poder tener una Nikon. Me gustaba Ashai Pentax, entre otros, por qué Colita tenía dos Spotmatics. Paco Casanova que en aquella época trabajaba en Lázaro de la calle Tallers me encasquetó una Yashica Secktor 1000 DTL. La fábrica ya había avanzado las prestaciones del obturador a 1000 y un buen fotómetro. Era una buena cámara accesible para mi bolsillo.

En 1977 me compré una Nikon F2 Photomic, con un 24mm F2,8 y un tele 105mm f2,5, que aún pienso que han sido las dos mejores ópticas para hacer reportaje. Ahora trabajo con Canon.

¿Qué tipo de fotografía te interesa más?

Cuando estudié en EMAV, pensaba que me dedicaría a la fotografía de publicidad, pero trabajar para hacer reportaje social para la revista de Poblenou 4 Cantons, me di cuenta de que no había cosa más maravillosa que pisar la calle, hablar con la gente y mirar de documentar lo que está pasando.

 

¿Profesionalmente a qué tipo de fotografía te dedicas?

Toda la vida la he dedicado al periodismo gráfico.

Además, he tenido la suerte de publicar libros de Barcelona compartiendo la autoría con grandes profesionales y amigos como Josep Maria Huertas, Jaume Fabre, Paco Elvira, etc. Algunos de los títulos que destacaría son: Carrers de Barcelona (1982) y Monuments de Barcelona (1984) con mi amigo Pere Monés; Barcelona 90 (1990); 50 Vegades Barcelona (1995); tuve el honor de colaborar en el último libro de Xavier Miserachs sobre el Passeig de Gràcia (1998); Història dels Barris de Barcelona (cuatro volúmenes entre 1998-2000); La Diagonal (1999) y Un tomb pel Campus de la Universitat Pompeu Fabra.

Con mi amigo, el periodista Josep Maria Huertas y su hijo Guillem, publicamos Sant Martí de Provençals, Història d’un barri i la seva gent (2001); Com ens divertíem… com ens divertim (2002); L’illa (2003) junto con Paco Elvira; L’escorxador ahir (2004); Poblenou, blanc i negre (2004) y Barcelona, com era, com és (2005); Barcelona. 30 anys de vida ciutadana (2008) y Barcelona vista pels grans fotògrafs (2013).

 

¿Qué quieres trasmitir con tus imágenes?

Ante todo, siempre he priorizado la información dentro de la fotografía. Soy un periodista que no escribe, transmito la información a través de las imágenes. Soy consciente de la fuerza y la rapidez de que llega a todo el mundo.

Si puedo, si la noticia te lo permite, también miro que mis fotografías tengan pinceladas de ironía. Me encanta Elliott Erwitt.

¿En qué proyectos estás trabajando?

Actualmente, me lo tomo con calma (debe ser por la edad) pero continúo paseando y congelando calles, plazas, personas. Como decía la fotógrafa Berenice Abbott: “La fotografía solo puede representar el presente. Una vez fotografiados, el sujeto se convierte en parte del pasado”. Los fotógrafos tenemos la habilidad de tener un ojo con una visión muy aguda y podríamos decir que congelamos el tiempo.

Ahora lo que me divierte es fotografiar personas delante de paredes de Street art, imágenes publicitarias o escaparates dialogando entre ellas.

 

¿Qué influencia crees que tienen las redes sociales como Instagram en la fotografía actualmente?

Extrapolando la cantidad de imágenes malas e intrandescentes que se publican, pienso que ha habido un gran avance. Había gente que tenía visión fotográfica, pero no tenía posibilidades de comprarse una cámara y gastarse el dinero en carretes, ahora hacen fotografías. El problema es el criterio de publicación. Se cuelgan tantas imágenes que las buenas pasan desapercibidas.

El reto de cada uno, será reducir y escoger tal y como hacen los editores gráficos de revistas, tienen en la mesa un gran reportaje de 100 fotografías, pero en la revista solo caben 8 y una debe ser la principal, la que abrirá en doble página.

Es curioso como el editor, con tantas buenas imágenes, tiene clara cuál será la de apertura. Tenemos, pues, que educar a los autores a hacer lo mismo con sus fotos. Se que es difícil, pero esto les hará crecer y ganarán en salud, pues si no reventará, no el disco duro del ordenador, sino su cerebro.

 

¿Cuánto tiempo hace que conoces VisualKorner?

Hace un par de años y ha sido una gran sorpresa. Mi amigo Marcel·lí Saénz me habló de la calidad / precio y de la profesionalidad en el tratamiento de las copias, un día vine a encargar unas cuantas, y la sorpresa fue mayúscula en encontrarme con antiguos amigos.

¿Qué tipo de trabajo realizas con nosotros?

Básicamente, positivado de copias Blanco y negro, pero estoy abierto de nuevas aventuras.

 

Háblanos de tu exposición ‘Congelando el tiempo. El alma detrás de la lente’

Cuando Agustí y Jose me invitaron a exponer, me hizo mucha ilusión por la relación que he comentado anteriormente, y no tardé mucho en decidirme. Exponer retratos de fotógrafos en la casa de los fotógrafos. Por razones de espacio, faltan muchos amigos y compañeros.

En algunas culturas existe la creencia de que cuando alguien te fotografía, se apropia no solo de la imagen de la persona retratada, sino también de su alma.

La verdad es que la fotografía tiene la capacidad de parar el tiempo, de congelarlo. Tenemos la maravillosa oportunidad de recuperar imágenes pasadas, reencontrarnos con personas que ya no están con nosotros o conocer partes de nuestro planeta que nunca hubiéramos imaginado que existen. Y todo eso gracias al hecho que el ojo fotográfico vio ese momento y decidió que tenía alma.

No creo que los fotógrafos robemos el alma, más bien, captamos el alma de quien fotografiamos. Y, además, gracias a la fotografía podemos navegar por la memoria. Y esto es pura magia.

 

¿Cómo valoras el servicio?

Lo encuentro muy profesional, la gente es atenta y amable.

 

Y, para terminar, déjanos una frase que te motive o te defina.

¡Uf! Hay muchas, pero me quedaría con esta de Walker Evans: “El secreto de la fotografía es que la cámara adquiera el carácter y la personalidad de quien la lleva”.

Y con esta otra: “La fotografía sólo puede representar el presente. Una vez fotografiados, el sujeto se convierte en parte del pasado.” Berenice Abbott

 

Contacto

Instagram: @pepe_encinas

Web: Pepe Encinas

 

Si queréis estar al día de todas nuestras exposiciones y novedades, no olvidéis estar atentos a nuestro blog.

 

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¿Qué? “Congelando el tiempo. El alma detrás de la lente” de Pepe Encinas

¿Cuándo? Del 28 de noviembre al 15 de enero de 2024

¿Dónde? Visualkorner (Carrer Balmes, 354, baixos, 08006, Barcelona)

¿Cuánto? Gratis